El mundo a través de ti

Días, semanas, minutos intensos en las que hemos estado mas que nunca en nuestra casa: STAY AT HOME.

Salir daba miedo y estar sin salir también, por lo que los sentimientos chocaban entre sí y de alguna forma desestabilizaban a cualquiera.

Hoy, no te voy a contar lo bien o lo mal que he estado, eso lo he vivido yo y felizmente me lo quedo. Lo que si te quería contarte es ese día que salí a pasear.

Y no te hablo de salir a la calle, NO. Sino de salir a pasear por mis momentos.

Después de los grandes momentos, quedan inolvidables recuerdos.

Aún recuerdo a mi abuela Fina, sentada en su sofá y tiernamente comenzaba su relato:

«Ayer por la noche me di un paseo por Cádiz, cerré mis ojos y estaba en mi terraza viendo la puesta sol, luego me fui a pasear por el paseo marítimo y disfruté con las conversaciones que tuve con mis amigas en la playa.

¡Qué buen día hizo! Estuvimos hasta la noche pegaditas en la arena seca”.

Yo la miraba con asombro y admiración.

Y le decía:

– Jo Abu, que bonitos recuerdos!.

Si, estos son mis recuerdos, son mi vida en este momento, y fui muy feliz, así que ahora que no puedo estar allí los vivo intensamente a través de mi corazón porque allí están almacenados éstos.

Esta reflexión me la hizo más de una vez y sinceramente ahora la entiendo.

Y es que, te tengo que contar, que ahora paseo mucho, esos paseos no me los cuenta el móvil pero si mi alma.

En los días soleados, aprovecho el sol que justo da en mi ventana para sentarme allí, ponerme música, cerrar los ojos y dejar que ésta me lleve de paseo. Es curioso, las sensaciones que puedes llegar a recuperar o sentir sólo con esos minutos para ti.

Y yo te animo a eso:

 

Sal a pasear!.

Quizás sea la música tu compañera, o quizás no. Tú eliges es tu momento.

Pruébalo, y dime ¿ A donde irías a pasear ahora?.

 

y RECUERDA, Ve despacio y DISFRUTA del paseo!.